El bazo es un órgano intra abdominal localizado en el cuadrante superior izquierdo, tiene forma convexa a nivel superolateral y cóncavo a nivel inferomedial, con una ecogenicidad homogénea; por lo general se utiliza como referencia la 10ª costilla.
El bazo de un adulto tiene los siguientes rangos de medidas aproximadas: 12 cm de longitud, 7 cm de ancho y 3-4 cm de espesor; peso en promedio 150 gramos (80 – 300 gr).
Para su exploración con el ultrasonido es necesario colocar al paciente en decúbito supino y situar el transductor en plano coronal a nivel posterior en uno de los espacios intercostales izquierdo inferiores; podemos valernos de los diferentes grados de inspiración para explorar diferentes proyecciones del bazo; también puede ser de mucha ayuda pedir al paciente que se ruede unos 45º ó 90º sobre su costado derecho.
Utilizaremos un transductor de 2-5 MHZ, el parénquima esplénico es homogéneo y se considera que el hígado es más ecógeno que el bazo, y en una imagen dual podemos comparar la ecogenicidad de ambos órganos.
Se considera aumento del tamaño del bazo cuando supera los 12 cm de longitud y 7 cm de anchura; el ultrasonido no es útil para el diagnóstico específico de la esplenomegalia pero puede ser de ayuda para orientar el diagnóstico de acuerdo al grado de esplenomegalia asi:
a) La esplenomegalia leve-moderada generalmente la producen los procesos infecciosos y la hipertensión portal (en este último la presencia de várices esplénicas ó ascitis apoyan el diagnóstico).
b) La esplenomegalia severa suelen producirla la leucemia, linfomas ó la mononucleosis infecciosa.
Las principales lesiones focales del bazo son:
En el ultrasonido aparecen como áreas sin ecos de bordes lisos y bien delimitados; pueden ser:
Las lesiones focales de bazo más frecuentes son debido a infecciones granulomatosas y se pueden apreciar como lesiones ecógenas brillantes y focales con ó sin sombra acústica. Las más comunes son: la histoplasmosis y la tuberculosis; aunque también se ha informado de sarcoidosis.
Las neoplasias malignas primarias son muy raras y son: el linfoma primario y el angiosarcoma.
Las metástasis esplénicas son más frecuentes en el melanoma maligno, linfoma y leucemia; pero también se han informado de cáncer de ovario, mama, pulmón y estómago.
El hemangioma de bazo se ha encontrado hasta el 14% de las necropsias, aparecen como lesiones focales de aspecto hiperecogénico bien delimitadas, pero también pueden presentar ecogenicidad mixta con espacios quísticos.
El infarto esplénico, es una lesión hipoecoica en forma de cuña y de localización periférica.
Los hematomas subcapsulares aparecen como una acumulación de líquido en forma de semiluna y sigue el contorno del bazo; a pesar de que la tomografía es el mejor estudio para valorar el trauma esplénico, el ultrasonido puede ser una herramienta muy importante en los servicios de urgencias para valorar el trauma aguado del cuadrante superior izquierdo, valiéndose de que el ultrasonido es fácil, rápido y portátil.
Si el ultrasonido se realiza inmediatamente el hematoma es fácilmente reconocido debido al hematoma líquido que aparece hipoecogénico y puede distinguirse con facilidad del parénquima esplénico; si se realiza entre 24 – 48 hrs entonces la sangre se coagula y su ecogenicidad puede fácilmente confundirse con el parénquima esplénico dando la apariencia de un bazo aumentado de tamaño; y si se realiza después de las 48 hrs la sangre empieza a licuarse, entonces el hematoma aparecerá hiperecogénico con bordes irregulares.
El ultrasonido también es útil para diagnósticas hematomas intraparenquimatos ó subcapsulares rotos, en este último caso aparecerá líquido alrededor del bazo en el hipocondrio izquierdo.
Resumen escrito por el Dr. Alfredo Rascon